Diez grandes beneficios de la práctica del Karate

Reproduzco aquí un texto que escribí en julio de 2016, originalmente para el sitio web de la Asociación Karate-Do Tanaka (aunque muchas personas lo copiaron después sin autorización). Hablar de los beneficios del Karate siempre es muy importante, ya que este es un arte para preservar la vida por encima de cualquier otra cosa.

Los que practican Karate solo tienen beneficios. La filosofía de este arte marcial está orientada al desarrollo personal y al cultivo de una vida saludable. No se trata de violencia, sino de encontrar el equilibrio. Y lo mejor de todo, el Karate está recomendado para todos, desde adultos hasta niños, hombres y mujeres! Conoce algunos de los beneficios del Karate:

1) Es un ejercicio que trabaja todo el cuerpo, ayuda a perder peso y aumenta la resistencia.

El kárate es una actividad aeróbica que requiere el movimiento de todo el cuerpo, de la cabeza a los pies. Cualquiera que quiera cuidar su forma física encontrará en esta práctica una excelente opción. En el entrenamiento trabajas y fortaleces miembros superiores e inferiores, ganando definición muscular y mejorando tu preparación física.

2)  Desarrolla la capacidad cardiovascular y la capacidad respiratoria.

El corazón es un músculo y, como tal, necesita ser ejercitado para mantener su pleno funcionamiento, previniendo problemas. La práctica de Karate garantiza esto, ya que proporciona el bombeo eficiente de la sangre y el transporte de oxígeno por todo el cuerpo. También está el desarrollo de la parte respiratoria, ya que es un punto muy importante del entrenamiento del Karate, incluyendo ejercicios encaminados a la correcta respiración. Todo esto ayuda al practicante a tener más energía y disposición, porque el cuerpo funciona mejor.

3) Aumenta la coordinación motora y los reflejos.

El entrenamiento constante de Karate tiene como objetivo ejecutar los movimientos de manera eficiente y precisa. Cada entrenamiento de kata conduce a una mejora en la coordinación, hasta el punto de que incluso puedes hacerlo con los ojos vendados. Además, por supuesto, hay entrenamiento con compañeros para mejorar los reflejos y la correcta aplicación de lo aprendido, según la situación.

4) Mejora la concentración.

Además de movimiento, Karate es observación y razonamiento. Es necesario estar atento a los detalles durante el entrenamiento, como las orientaciones, los ejemplos de los instructores y la ejecución actual de técnicas y posturas. Se necesita la capacidad de pensar e interpretar lo que se está aprendiendo. Por lo tanto, Karate es un ejercicio de atención y concentración.

5) Ayuda a corregir la postura.

Una parte importante del entrenamiento de Karate es moverse correctamente, con una postura firme y erguida, sin agacharse o realizar las técnicas de forma desenfocada. Con el tiempo, a medida que mejoras en el dojo, la mejora en la forma en que te comportas se vuelve visible.

6) Ayuda a mejorar la autoestima y el control emocional.

Al inicio de todos los entrenamientos se realiza una meditación de preparación para lo que se va a practicar, dejando fuera del dojo todo lo que no sea pertinente. Esto, además del propio entrenamiento, ayuda a relajarse, desahogar problemas y ganar tranquilidad. Otro punto es que a medida que entrenas aprendes más sobre ti mismo y tu potencial, por lo que adoptas una postura segura y asertiva para superar las dificultades dentro y fuera del dojo.

7) Es autodefensa.

Cuando el Karate fue creado por los residentes de la isla de Okinawa, ahora parte de Japón, era una cuestión de vida o muerte. No podían portar armas y dependían únicamente de su capacidad para sobrevivir a los ataques de bandidos y alborotadores. Tal como las técnicas fueron establecidas y transmitidas a nosotros hoy, es obvio que cumplieron con su objetivo de preservar la integridad física de los practicantes. Actualmente las amenazas son diferentes, pero saber defenderse sigue siendo fundamental.

8) Tiene una rica filosofía, basada en el respeto y la disciplina.

El kárate no es un mero deporte. Es una forma de vida, una búsqueda constante del individuo por ser mejor para sí mismo y para la comunidad. Y estos valores se enseñan dentro del dojo para que también se puedan aplicar fuera de él. Aprendes la importancia de respetar a tus compañeros y buscar el ejemplo de tus mayores, ser puntual y dedicado. La filosofía de este arte marcial tiene su piedra angular en el budo, la versión moderna del código samurái, con valores como la justicia, el coraje, la compasión, la cortesía, la sinceridad, el honor y la lealtad.

9) Desarrolla habilidades interpersonales y de liderazgo.

Un auténtico dojo acaba siendo tu segundo hogar y tratas con diferentes perfiles de personas. A medida que te haces mayor, eres como un hermano mayor con la misión de enseñar a los menos experimentados. Con eso, aprendes formas de mandar, de enseñar con el ejemplo y también de psicología para guiar a los estudiantes con diferentes potencialidades y dificultades.

10) Enseña la importancia de la persistencia para alcanzar tus metas.

No hay una manera fácil de aprender Karate. Cada entrenamiento es un paso más y las técnicas se dominan mediante la repetición. Pero cada evolución, cada nuevo kata aprendido, cada reto superado trae consigo una sensación de satisfacción, de ganas de ir más allá. Ser karateka se trata de cultivar el espíritu guerrero que te ayudará a ganar en la vida.

¿Interesado? Entonces considere traer Karate-Do a su vida y descubra muchos más beneficios. Busca escuelas cerca de ti, haz un entrenamiento experimental y elige la que más te identifique. Invita a amigos y familiares. ¡Eres muy bienvenido a ser parte de esta comunidad!